Colaboradores

Para que los voluntarios que formamos la Agrupación podamos llevar a cabo nuestra labor, distintas entidades colaboran con nosotros para dotarnos de más y mejores medios.

Colaboradores permanentes

El Gobierno de Cantabria a través de sus diferentes Consejerías, pero fundamentalmente mediante la Consejería de Presidencia y Justicia por medio de la Dirección General de Protección Civil.

De forma continua se nos dota por parte de esta Dirección General de diferentes medios, de esta manera disponemos desde dos vehículos y un equipo de intervención rápida en extinción de incendios, pasando por dos bombas de achique, un generador y una motosierra, hasta diverso material de intervención y vestuario. Se trata por lo tanto de la principal fuente de recursos de la que disponemos.

Además de todo esto, con los Planes de Formación Ciudadana impartidos por el Centro de Estudios de la Administración Regional de Cantabria (C.E.A.R.C.), podemos estar formados para saber actuar ante un riesgo, hallar la mejor forma de organizarnos ante una catástrofe y así poder actuar de la mejor forma posible ante una calamidad pública.

La colaboración del Ayuntamiento de Reocín se reduce fundamentalmente a los gastos derivados del mantenimiento de los materiales de los que dispone la Agrupación.

Otros colaboradores

En el año 2011 el Banco Santander nos subvencionó la colocación de un puente de luces junto a un transceptor móvil compacto VHF en un vehículo cedido por el Gobierno de Cantabria ese mismo año, de esta manera la Agrupación puede contar con dos vehículos prioritarios para acudir a las emergencias.

En los años 2011 y 2009 la Universidad de Cantabria nos dotó de mobiliario gracias al cual pudimos acondicionar un aula de estudio en nuestra sede, además de diverso material informático con el que podemos realizar labores de organización y preparación de las intervenciones.

En el año 2010 la Obra Social de Caja Madrid nos concedió una subvención gracias a la cual pudimos adquirir un maniquí para la práctica de la reanimación cardiopulmonar (RCP), que además cuenta con la ventaja de poseer una caja de señales que nos indica cómo realizarla correctamente.

En el año 2008 la Obra Social de Caja Cantabria nos hizo entrega de un desfibrilador externo semiautomático (DESA), que desplazamos a las distintas intervenciones para poder actuar en caso de necesidad.